La Navidad es uno de los festejos más internacionalizados y que es celebrado de distintas maneras en todo el mundo, acorde a la religión que se profese o de las costumbres particulares de cada país.
Sin embargo, existe un personaje que simbólicamente ha permeado en gran parte de las culturas con independencia de si practica o no la fe cristiana, la que dio lugar a la tradicional Nochebuena.
Sin lugar a dudas, Papá Noel o Santa Claus, el anciano que entrega regalos a los niños representa una de las figuras más icónicas de las festividades de fin de año.
Se representa vestido de rojo y blanco, con un gorro de los mismos colores, sobrevuela las ciudades sobre un carro tirado por renos e ingresa a las viviendas supuestamente por las chimeneas para dejar obsequios en calcetines que colgados.
Hasta aquí, todo lo que dicta la tradición occidental. Sin embargo, se cuenta que el personaje realmente está inspirado en San Nicolás de Bari, un obispo turco conocido por sus acciones hacia el prójimo y devenido como el gran protector de los infantes.
Nicolás repartió su riqueza entre las personas más necesitadas, por lo que fue nombrado como el santo patrón de Turquía, Rusia y Grecia.
Papá Noel
Pero, ¿realmente es el Papá Noel que conocemos? Veneración aparte, el símbolo navideño fue una construcción del marketing de la conocida marca Coca Cola, pues el santo era en extremo delgado, poseía gran estatura y tampoco vestía de rojo.
Tiempo antes de que la popular bebida lanzara su campaña, fue el escritor Clement Moore quien imaginó en 1823 a un San Nicolás que surcaba el cielo en un trineo junto a nueve renos: Rudolph, Cupido, Blitcher, Donner, Cometa, Zorro, Brillante, Danzante y Centella.
Hacia 1931, Coca Cola le encargó al caricaturista Thomas Nast que pintara a un Santa Claus parecido y este lo concibió de la forma que conocemos hasta hoy: un señor anciano y regordete, con el cinturón y botas negras, portando un traje rojo y blanco, los propios colores de la compañía de gaseosas.
La denominación de Papá Noel, tal y como se conoce en países de habla hispana, procede del francés “Santa Claus Pere Noël”, el padre de la Navidad.