Luego de un cierre de dos años, la localidad bíblica de Belén en Cisjordania volvió a abrir a los turistas y festejará durante más de dos semanas la fecha que marca el nacimiento del niño Jesús.
El hecho de que Cisjordania no cuente con su propio aeropuerto condiciona que los turistas extranjeros que viajan a la ciudad bíblica deban ingresar por el aeropuerto Ben-Gurión, en Israel. El Ministerio de Turismo espera unos 120.000 visitantes cristianos durante la semana de Navidad.
“La Navidad es la fiesta de la ciudad, hemos tomado mucho tiempo y hecho mucho esfuerzo para prepararla”, dijo a la agencia AFP la alcaldesa del municipio, Hanna Hanania.
“Queríamos tener participación internacional y organizamos canciones y espectáculos para niños con cantantes de Francia, Sudáfrica y Malta”, añade.
La Nochebuena arrancó con un desfile a ritmo de tambores y gaitas de bandas palestinas, bailes árabes y villancicos, al que asistieron miles de fieles. Se prevé que el día 25 arriben cientos de turistas al sitio que marca el arribo al mundo de Jesucristo según la tradición cristiana.
Pierbattista Pizzaballa, máximo representante de la Iglesia Católica en Tierra Santa, encabezó el habitual peregrinaje de Nochebuena desde Jerusalén hasta Belén que concluyó en la Basílica de la Natividad, levantada sobre un pesebre.
Navidad Belén
“Vivimos tiempos difíciles, pero el mensaje de la Navidad es siempre un mensaje de paz”, señaló Pizzaballa quien cruzó a pie el muro de hormigón israelí que separa Belén de la Ciudad Santa.
Grandes grupos de personas ya han copado los hoteles, según reporta la agencia AP, “y recorren en masa sus calles angostas, comprando rosarios, pesebres o comiendo falafels y tomándose un café para sortear el frío en los restaurantes de la famosa plaza en la que, según la Biblia, nació Jesús”.
Otros reportes confirman que mientras algunos peregrinos meditan en la Basílica de la Natividad otros se pasean por Belén con la cabeza cubierta con gorros rojos y blancos de Papá Noel.