Los residentes de un edificio de Miami ni siquiera logran disfrutar de la tranquilidad de un baño en la piscina del condominio debido a la cercanía de un centro de detención con reclusos bastante indisciplinados.
El inmueble en cuestión, de 52 pisos, consta de dos torres y está ubicado justo al lado del Centro Federal de Detención desde donde sus “vecinos” suelen gritar improperios, silbar o perturbar la paz de las personas que allí habitan.
Un señor que reside en uno de los pisos de Downtown 5th, en la esquina de Northeast 5th Street y Miami Avenue, decidió grabar el escenario para presentar pruebas a la policía y realizar una denuncia formal, según reportó Local 10.
La víctima se identificó como Ryan Rea y aseguró al medio que los reclusos estaban siendo demasiado invasivos con su espacio recreativo. “No uso mucho la piscina aquí porque no recibe mucho sol, pero sí recibe sol durante el tiempo que están allí”, explicó.
Según Rea, conocía de la cercanía de la cárcel cuando se instaló en el condominio por el cual abona unos 2,700 dólares al mes por un apartamento de dos dormitorios.
Reclusos de Miami molestan a los residentes de un condominio
Este Centro Federal de Detención acoge tanto hombres como mujeres de todos los niveles de seguridad desde principios de la década de los noventa. El condominio, por el contrario, fue inaugurado el año pasado donde antes se hallaba un estacionamiento.
“Me mudé justo cuando todo el mundo se mudaba a Miami y había muy poca disponibilidad”, admitió también el afectado.
Por su parte, los administradores de esta propiedad se justificaron alegando que el centro aparece en “todos los recorridos” y que, aunque algunos residentes se habían quejado previamente, no parecía un problema demasiado exagerado como para alertar a la policía.
En el video compartido por el ciudadano pueden notarse los silbidos impertinentes de los reclusos que estaban dirigidos en ese momento a dos mujeres que tomaban el sol.
En tanto, un portavoz del centro dijo al medio local que no discuten “la orientación interna o las prácticas de seguridad”, aunque la cinta se encuentra actualmente “bajo investigación”.