Varios clientes de Etecsa han asegurado que si la compañía no pone Internet ilimitado de nada valdrán las recargas internacionales que multipliquen el saldo en Cuba. No conseguirán ingresar más divisa.
La compañía promocionó recientemente su recarga internacional que comienza este 6 de febrero y se extiende hasta el 28 de febrero. El beneficiario en Cuba que reciba entre 250 y 1250 CUP, multiplicará por 6 su saldo.
“La recarga esta por 6 la podemos hacer aquí. $20 ahora mismo son 3300 CUP. Si te los ponen desde afuera te llegan 3000, así que tú desde aquí te pondrías hasta dinero de más”, escribió la tuitera @yo_soy_vanessa_, quien además señaló que “lo de internet ilimitado es lo único que logró que la gente recargara de nuevo desde afuera”.
La semana pasada, una alta ejecutiva de ETECSA reconoció que los ingresos de la compañía habían disminuido mucho y que por ello no habían podido mejorar la infraestructura para la conexión en Cuba. Aunque no mencionó cifras, las constantes promociones de recarga son una muestra de la urgencia de ingresar moneda extranjera.
Tanto es así que, en declaraciones a Cubadebate, la misma funcionaria admitió que aunque estas recargas generan más tráfico y sobrecarga a la red las necesitan para adquirir “divisa fresca”.
CUBANOS A ETECSA: ENTRE BURLAS Y FEROCES CRÍTICAS
Quienes antes criticaban las ofertas de Internet ilimitado en “horario de custodio” en Cuba, ahora preguntan por qué se eliminó de la nueva promoción.
“Y vuelve Juana con la palangana”, “¿por qué quitaron el Internet ilimitado?” y “no me digan que esta es la tan esperada recarga, por Dios”, fueron algunos de los comentarios.
Otros usuarios cuestionaron el uso que podrán darle a esta bonificación en el estado actual de la conexión en Cuba.
“De mí no van a ver ni 1 peso más. Tarifa plana de 40 GB + free WhatsApp full + datos free modo custodio+ mis 500 cañones, por menos que eso, ni 1 dolarito más”, tuitearon.
Otro cliente aseguró que le venció la anterior promoción del Internet Ilimitado y prácticamente no lo pudo usar. “Eso, ¿quién me lo devuelve?”, preguntó.