Los trabajadores estatales cubanos casi siempre se encuentran en desventajas laborales respecto a los privados, sobre todo por el bajo monto del salario que perciben y porque muchas veces el estado retrasa los pagos de sueldos por diversas razones y sin darles explicación alguna.
“Necesitamos una respuesta” fue la publicación de varios empleados gastronómicos en la provincia de Santiago de Cuba que expusieron en redes su situación con el retraso del cobro del salario de tres meses.
Durante todo este tiempo ellos se mantuvieron trabajando en sus puestos sin percibir remuneración alguna, por lo que usaron un grupo de compraventa para hacer catarsis y ver si algún decisor se pronunciaba públicamente.
“En estos momentos los trabajadores de Gastronomía no sabemos qué va a pasar con nosotros, estamos con el credo en la boca”, afirmaron.
Sin salario gastronómicos cubanos
Se trata en específico de los empleados de la Empresa Municipal de Gastronomía y Recreación, una entidad estatal que abarca restaurantes, bares y otros espacios. Los usuarios de redes no tardaron en reaccionar al pedido de los gastronómicos.
“Eso pasa porque nosotros tenemos la culpa. Aun sin efectuarse el pago siguen trabajando. Si hubieran cerrado puertas y ventanas quizás ya el problema estuviera resuelto”, opinó una mujer.
Otro internauta les aconsejó que se dirigieran al sindicato a reclamar sus sueldos ya que resulta una infracción penada por ley y que luego buscaran trabajo en el sector particular donde seguramente se evitarían este tipo de problemas. Así están estos cubanos sin salario, desesperados.
“Si les deben tres meses, pero sus administradores no hacen nada para que vendan con calidad lo que realmente se debe cerrar los locales y mandarlos a todos hacer algo más útil y así verán sus salarios con buen esfuerzo”.
Otra persona aconsejó: “Lo que deben es acabar de trabajar y hacer paro nacional…cuando comience una empresa saldrán todas porque ya no se puede más vivir en tanta mentira…piensen en sus hijos y sus familias que ahora mismo tal vez no tengan qué comer por falta del dinero sudado con su trabajo”.