Michel González, un exatleta del equipo nacional de Cuba que decidió emigrar a Estados Unidos en busca de un mejor futuro para su familia. Michel era uno de los mejores triatletas de su país, pero se sentía limitado por las condiciones económicas y deportivas de la isla. Durante la pandemia, tuvo que trabajar en tres empleos diferentes para poder sostener a su esposa, la periodista deportiva Karlienys Calzadilla, y a su hija pequeña.
El triatlón es un deporte que combina tres disciplinas: natación, ciclismo y carrera a pie. Se trata de una prueba de resistencia que exige un alto nivel de preparación física y mental. El triatlón nació en Estados Unidos en la década de 1970 y desde entonces ha ido ganando popularidad en todo el mundo.
En 2023 se celebrará el Campeonato de Europa de Triatlón en Madrid, una oportunidad para conocer más sobre este deporte y sus protagonistas.
Michel González y su futuro en EE.UU
Michel contó a la revista Play Off Magazine que salió de Cuba en 2021, después de participar en una competencia internacional. Aprovechó que tenía visa desde 2017 y dio el paso de quedarse en Estados Unidos. Su familia no lo entendió al principio, pero luego lo apoyó y lo siguió en la peligrosa travesía por Centroamérica hasta llegar a su destino.
“Mi familia, al principio no lo entendía y no estuvieron de acuerdo conmigo, pero con el tiempo y los días, les hicimos entender nuestros puntos de vista. Los convencimos de que cada cual tiene sus criterios y decisiones por distintas que sean y merecen respeto. Hay que echar para adelante y tratar de vernos pronto, para que todo sea por una mejoría”, señaló.
Michel aseguró que su sueño era ser un atleta olímpico, pero que en Cuba el triatlón es un deporte desfavorecido frente a otros países. “El triatlón es un deporte en el que la clasificación a Juegos Olímpicos no es pareja para todos los atletas”, dijo. Sin embargo, no se rinde y sigue entrenando para mejorar su salud física.
Michel es un ejemplo de superación y de pasión por el triatlón, un deporte que requiere de mucha disciplina, sacrificio y constancia.
“Llevo un año aquí y sentimos que estamos haciendo las cosas bien, avanzando y dando pasos. Si valió la pena o no, el futuro lo dirá”, sentenció.