Una cubana que lleva más de 10 años en España, Diosmary, de 49 años y natural de Pinar del Río, contó al Diario de Mallorca su difícil situación, ya que desde hace casi dos meses vive en el Aeropuerto de Palma.
Es la segunda vez que se ve obligada a refugiarse en el Aeropuerto por falta de recursos. A pesar de llevar tanto tiempo en España, no ha podido regularizar su situación ni encontrar un empleo y una vivienda dignos.
“Lo único que quiero es conseguir un trabajo para que me den el permiso de residencia aquí en Mallorca (…) Hay mucha gente que vive en el aeropuerto, no soy la única, mientras no robes y no hagas destrozos no te pueden echar de aquí”, dijo.
Diosmary agradeció también la ayuda de la Unidad Móvil de Emergencia Social (UMES) de la Cruz Roja, que cada noche les trae comida a ella y al resto de personas que viven en el Aeropuerto.
Explicó que sus días son bastante tranquilos, aunque a veces algunos hombres le proponen dinero por sexo o por un lugar donde dormir.
“En ciertas ocasiones, hombres se acercan ofreciéndome dinero a cambio de favores sexuales o de un lugar donde alojarme, pero yo no me presto para eso”, afirmó.
Cubana duerme en Aeropuerto de Mallorca
Diosmary llegó a España en 2012 con su antigua pareja, un cubano-español, después de hacer los trámites necesarios en Cuba. Su destino fue Mallorca, donde esperaban iniciar una nueva vida.
Pero su exmarido se desanimó al no encontrar trabajo y se volvió a Cuba. Diosmary no pudo volver, porque le faltaba documentación y sin papeles españoles tampoco podía regresar a Cuba como turista.
Desde entonces, Diosmary ha vivido en varios lugares de acogida, como Ca l’Ardiaca, pero se fue de allí al poco tiempo porque no se sentía cómoda. También ha estado en casas donde le ofrecían alojamiento a cambio de hacer labores domésticas y cuidar de la casa.