El zurdo pinareño Livan Moinelo fue uno de los héroes del triunfo de los Cazadores de Artemisa sobre los Cocodrilos de Matanzas en el segundo juego de la final de la II Liga Élite del Béisbol Cubano.
El relevista, que se recupera de una lesión en el codo, lanzó 3.1 entradas sin permitir carreras ni hits, y ponchó a cinco bateadores. Tras el partido, habló con el periodista Guillermo Rodríguez Hidalgo sobre su actuación y su estado físico.
“Me tracé una estrategia de tirar un poco más de lances para ver cómo reaccionaba mi brazo y creo que estuvo bien, mantuve la velocidad, aunque un poco descontrolado. A medida que voy lanzando más, mi brazo se siente mejor”, dijo.
Moinelo debió someterse a una cirugía debido a una lesión en el codo de su brazo de lanzar durante la temporada en Japón y trabajó en su rehabilitación con el entrenador de picheo José Manuel Cortina durante 16 semanas.
“Me siento en perfectas condiciones. Ya estoy al 70 u 80 %. He entrenado intensamente con el profesor Cortina durante estos meses en el estadio Capitán San Luis”, contó a inicios de enero a la periodista Angélica Arce Montero para Cubadebate.
LIVÁN MOINELO: LIGA ÉLITE DEL BÉISBOL CUBANO
También explicó que decidió jugar con Artemisa para probarse y ayudar al equipo a ganar el título. “Les dije a los muchachos que si todo iba bien, lanzaría cuatro o cinco juegos con ellos. Esto me dará una idea de cómo estoy, y haré todo lo posible para ayudarles a ser campeones este año”, afirmó.
Sin embargo, a pesar de su valioso aporte, el pícher de 28 años anunció que el último juego que podrá lanzar será el de este viernes 19 de enero en Artemisa. “Tengo que regresar a Japón”, adelantó.
Los Cazadores empataron la serie final a un juego por bando al vencer 6×3 a los Cocodrilos en el estadio Victoria de Girón. El abridor Raymond Figueredo, de Industriales, lanzó cinco entradas y dos tercios con dos carreras permitidas, y la ofensiva artemiseña aprovechó las oportunidades con hombres en circulación.