El mentor de los “anaranjados” de la pelota cubana, Ramón Moré, no dio falsas esperanzas con el equipo de Villa Clara en esta 63 Serie Nacional. Es un equipo diezmado y en apenas un año hubo que cambiar a 14 hombres. Con esos truenos no se puede aspirar a mucho.
Por segunda vez en su historia, la Serie Nacional de Béisbol se inicia en el mes de marzo. Este sábado, con el grito de ¡A jugar!, dio comienzo la edición 63 del principal pasatiempo de los cubanos.
Antes del debut de los Leopardos de Villa Clara frente a los Cachorros de Holguín en el estadio Calixto García, el mentor anaranjado Ramón Virgilio Moré Flaqué compartió sus impresiones con el diario Vanguardia.
“De un año a otro hemos tenido que cambiar a 14 hombres. Por ponerte un ejemplo, no es fácil suplir las vacantes de Cristian Rodríguez —contratado en Japón— y Magdiel Gómez alrededor de la segunda almohadilla. El equipo de ahora es muy joven, tenemos 11 peloteros que han jugado en una serie y 8 novatos”, dijo.
Ramón Moré no dio muchas esperanzas a los fan de Villa Clara
Moré precisó que “no me gusta comprometerme con el pueblo, porque hay que ser objetivo. Aunque suene mal, este es un equipo diezmado; prefiero sorprenderlos avanzando hacia el lugar que podamos, y si mejoramos la actuación del pasado año, bienvenido sea”.
“Escogimos lo mejor que hay en Villa Clara. No hay nada más que decir, es lo que tenemos y por eso integraron en el equipo”, agregó.
Tras el partido inicial, que perdieron los Leopardos, 5-1, la defensa estuvo fatal, así como la ofensiva, el talón de Aquiles de todos los años.