El gobierno cubano y Estados Unidos se encuentran en un nuevo punto de tensión luego de las protestas que se registraron el domingo en varias ciudades de la isla. Los manifestantes exigían electricidad, alimentos y libertades fundamentales.
Estados Unidos niega participación
Vedant Patel, Portavoz Adjunto Principal del Departamento de Estado de EE.UU., negó rotundamente la participación de su gobierno en las protestas. “Las acusaciones de que Estados Unidos está detrás de las protestas en Cuba son absurdas”, declaró. “Estamos siguiendo de cerca estos informes y creemos que lo que estamos viendo es un reflejo de la grave situación en la isla”.
Cuba acusa a Estados Unidos
El gobierno cubano, por su parte, convocó al Encargado de Negocios de EE. UU., Benjamin Ziff, para expresar su “rechazo contundente” a lo que consideran “conductas injerencistas y mensajes difamatorios” por parte del gobierno estadounidense.
El viceministro Carlos Fernández de Cossío entregó una nota de protesta a Ziff, recordándole los “estándares de decencia y honestidad” de las misiones diplomáticas. Además, acusó a Estados Unidos de tener una “responsabilidad directa en la crisis económica que enfrenta Cuba” y de “limitar las soluciones y respuestas a las necesidades económicas y sociales” del país.
Críticas al bloqueo estadounidense
En respuesta a las acusaciones del gobierno cubano, algunos usuarios de redes sociales recordaron que en 2022, Estados Unidos exportó $341 millones a Cuba, principalmente en carne de ave, soja y maíz. Además, destacaron que las exportaciones de Estados Unidos a Cuba han aumentado a una tasa anualizada de 24,4% en los últimos 27 años.
La situación en Cuba
Las protestas del domingo son un reflejo del descontento popular con la situación económica y social del país. La escasez de alimentos, medicinas y otros productos básicos, así como los cortes de electricidad, han generado un clima de tensión en la isla.
El gobierno cubano ha respondido a las críticas con medidas represivas, incluyendo la detención de varias personas, cortando Internet y desplegando toda una campaña en la que culpa a Estados Unidos de las protestas.