El extra clase pelotero cubano, el pinareño Omar Linares reveló en conversación con el periodista Joel García un anhelo que no pudo cumplir, el representar a Cuba en un Clásico Mundial de Béisbol.

Según el propio reportero a través de su Facebook, en el 2017, durante el IV Clásico Mundial, cuando comenzaba su trabajo como entrenador del club Dragones de Chunichi, en la Liga Profesional de Japón, Linares confesaba este viejo sueño.

“Siempre fue una ilusión en mi época, incluso algunos jugadores queríamos jugar en ese Primer Clásico, pero al final no pudimos. Aquello fue grandioso porque llegamos a discutir la final. En todas las ediciones ha sido un torneo muy fuerte, porque vienen los mejores jugadores de cada país. No me gusta especular, pero con el equipo de mi generación había que contar para el oro. Éramos temibles”, dijo entonces.

¿Usted cree lo mismo? Es cierto que eran un trabuco de miedo, pero los tiempos y el béisbol actual ya no son los de la época de Linares y compañía. No obstante con una última generación de oro, los cubanos sorprendieron en el I Clásico Mundial.

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Omar Linares y su generación

Para muchos, en los últimos 60 años de pelota en Cuba, Linares aventaja, por el rango de “mejor pelotero” a otros de sus compañeros de época como Antonio Muñoz, Antonio Pacheco, Víctor Mesa, Orestes Kindelán, entre otros.

El antesalista pinareño y de los equipos Cuba, quien todavía conserva el récord histórico de average para temporadas nacionales con 368 y es tercero en jonrones con 405 (detrás de Kindelán y Lázaro Junco), cumplió el pasado 23 de octubre, 54 años. El pinareño sigue su contrato con los Dragones en Japón, como manager de bateo.

Algunos refieren que sería el “mejor pelotero cubano de todos los tiempos”. Pero lo cierto es que pesa sobre él, el hecho de no probarse nunca en Grandes Ligas. Otros ponen al Yuli Gurriel por encima de él en esas comparaciones, porque siempre brilló allí por donde pasó, desde Cuba, Japón, como ahora con los Astros en Grandes Ligas.