Si el gobierno cubano contaba con la producción de azúcar para levantar su economía, pues sus esperanzas disminuyeron al comprobar que la misma está por debajo de las previsiones para el 2021, según confirmó la agencia Reuters.
Según este medio informes de medios estatales hablaron de una producción de al menos 200 mil toneladas métricas por debajo de las previsiones para fines de febrero.
Aunque ya no es una de las principales exportaciones de Cuba y marcha detrás de otras fuentes de ingresos en divisas como servicios médicos, turismo, remesas y níquel, el azúcar todavía le aporta a Cuba cientos de millones de dólares al año.
No solo el azúcar en sí, sino sus derivados, mientras produce energía, alcohol y alimentos para animales, con los subproductos de la actividad cañera.
Al igual que otras industrias, la agricultura y el cultivo de la caña enfrentan problemas estructurales en la economía local dependiente de importaciones. En los últimos seis meses se han adoptado reformas monetarias y de otro tipo orientadas al mercado.
Julio Andrés García, presidente del monopolio azucarero AZCUBA, dijo en diciembre que la industria estatal produciría 1,2 millones de toneladas métricas de azúcar sin refinar en 2021, similar al año anterior.
Antecedentes
La producción de Cuba ha promediado alrededor de 1,4 millones de toneladas durante los últimos cinco años, en comparación con un máximo que logró la industria de 8 millones de toneladas en 1989.
La cosecha se extiende de noviembre a mayo, con rendimientos máximos desde enero hasta mediados de abril.
Reuters estima, basándose en datos disponibles y fuentes locales, que la cosecha de este año llegará a menos de un millón de toneladas de azúcar por primera vez desde 1908.
Cuba consume entre 600.000 y 700.000 toneladas métricas de azúcar por año y tiene un acuerdo para vender unas 400.000 toneladas a China.
(Con información de Reuters)