Gobernador de Florida califica de “estafa” la nueva medida de inversión extranjera en Cuba

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El gobernador de Florida, Ron DeSantis ha reaccionado ante la nueva medida anunciada por el gobierno cubano de permitir la inversión extranjera en negocios privados en la isla y lo calificó como “un esquema de estafa”.

Su reacción estuvo condicionada por las recientes declaraciones del ministro de Comercio Exterior e Inversiones Extranjeras, Rodrigo Malmierca que aseguró que Cuba pretende abrirse a la inversión foránea como vía para salvar una economía en crisis: “Si se trabaja bien y se pone empeño, tenemos condiciones para atraer más capital extranjero a pesar de las dificultades existentes”, según subrayó el funcionario ante el Parlamento.

Sin embargo, DeSantis desconfía de las intenciones reales del gobierno cubano: “El régimen comunista de Cuba ha cocinado un nuevo esquema: pedir a los residentes de Estados Unidos inversiones en el sector privado”, comunicó DeSantis en una publicación de Twitter.

Fuerte el gobernador de Florida contra gobierno cubano

DeSantis procedió advertir a los estadounidenses que no cayeran en la trampa del gobierno de la isla: “En Cuba, los ciudadanos no tienen derechos de propiedad y todas las empresas son estatales. He instruido al Departamento de Oportunidades Económicas de la Florida y a la organización de desarrollo económico, Enterprise Florida para que alerten a los floridanos de no caer en esta estafa”.

De acuerdo con DeSantis, el capital foráneo de la supuesta inversión en el sector privado de Cuba nunca será destinado a mejorar las condiciones de vida del pueblo, sumido en una de las peores crisis de la historia de la “revolución”. “Deben ser conscientes de que su dinero inevitablemente terminará en los bolsillos del gobierno de la isla”, planteó.

La vicegobernadora de Florida, Jeanette Nuñez, también dedicó un momento en sus redes para respaldar la posición de DeSantis: “El mismo régimen que les robó a los cubanos sus medios de subsistencia, como a mis padres, ahora ruega desesperadamente a los estadounidenses que ‘inviertan’ en la Isla. Este esquema no es más que una estafa que engaña solo a los simpatizantes de la administración Biden”.

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