Los ciudadanos cubanos se han convertido en los principales compradores de la Zona Libre de Colón (ZLC) en Panamá, dinamizando la economía del enclave comercial más grande de América.
Según datos de la prensa panameña, los cubanos invierten su dinero en una amplia gama de productos, incluyendo enseres domésticos, artículos de higiene personal, ropa, ferretería y, en particular, aquellos que les permiten enfrentar la escasez de energía eléctrica en la isla.
Entre los artículos más demandados se encuentran cargadores eléctricos y plantas de energía, evidenciando la necesidad de los cubanos de contar con soluciones alternativas ante los constantes apagones que azotan su país.
“Mayormente miscelánea, alimentos, aseo personal, ese tipo de cosas. Este país tiene mucha más calidad y más variedad de cosas entonces preferimos venir aquí y no ir para Haití”, comentó un cubano al medio TVN Noticias.
Motivaciones y desafíos
La afluencia de cubanos a la ZLC también se ve impulsada por la cercanía geográfica, el idioma compartido, la zona horaria similar y las facilidades de transporte entre ambos países.
Sin embargo, los compradores cubanos también han expresado su deseo de que el gobierno panameño flexibilice los requisitos de visado, ya que aseguran ser molestados con frecuencia por las autoridades migratorias en los puertos de entrada.
Un mercado en recuperación
En 2019, la ZLC experimentó una caída del 13% en sus ventas, lo que motivó a sus administradores a buscar estrategias para reactivar la economía local.
Una de las medidas implementadas fue la promoción del turismo de compras entre los países del Caribe, incluyendo Cuba, Puerto Rico, Trinidad y Tobago, Jamaica, Bahamas y Barbados.
Esta iniciativa ha dado frutos, ya que en la actualidad los cubanos representan el 40% del total de visitantes a la ZLC, consolidándose como el principal grupo de compradores.
Fortaleciendo los lazos comerciales
La aerolínea panameña Copa Airlines juega un papel fundamental en el fomento del comercio entre Panamá y Cuba, al ofrecer vuelos directos entre Ciudad de Panamá y los aeropuertos de La Habana y Santa Clara.
Se espera que la continua afluencia de compradores cubanos a la ZLC contribuya a la recuperación económica del enclave comercial y fortalezca los lazos comerciales entre ambos países.