En medio de las altas temperaturas del verano, la escasez de combustible para cocinar y las enfermedades trasmitidas por los mosquitos, los cubanos están viviendo una de las situaciones más extremas producto a las fallas del sistema eléctrico nacional y los apagones.
El presidente cubano Miguel Díaz Canel ha reconocido públicamente las insatisfacciones del pueblo y ha comparecido en la televisión cubana para anunciar que los llamados apagones continuarán durante todo el mes de julio y principios de agosto.
“Hay un estado de malestar lógico en nuestra población”, admitió el mandatario. “El país se enfrenta también a una guerra comunicacional que busca desalentar, irritar más al pueblo y ponerlo contra la Revolución”, también expresó el gobernante en ostensible alusión a los sucesos del 11 de julio del pasado, cuyo detonante principal de las protestas fueran los interminables cortes del fluido eléctrico, sumado a las penurias económicas que ha provocado la mala administración de la isla.
Hace apenas dos días, estudiantes de la Universidad de Camagüey protestaron por los recurrentes apagones y la falta de agua en el centro estudiantil. El pueblo de Manzanillo, en el Oriente de Cuba, también le lanzó a las calles golpeando cacerolas como protesta a las más de ocho horas de apagones que deben soportar a diario, sobre toldo en horario nocturno.
La gente se queja de los apagones
“La gente protesta, también gritan en las noches en plena oscuridad, para no ser identificados, consignas en contra del gobierno y sus dirigentes”, contó un campesino granmense al medio independiente La hora de Cuba.
“Ya hay cacerolazos porque va en aumento el tiempo de los apagones. Ya los cortes de electricidad superan las nueve horas consecutivas. Incluso, ante las quejas de la población, (las autoridades del régimen) han tomado la medida de desconectar los teléfonos de atención a la población en la empresa Unión Eléctrica”, informó también el activista pinareño José Rolando Cásares.
En Santa Clara, al centro de la isla la situación también resulta bastante tensa. “Por ejemplo, aquí, en los repartos Virginia y Dobarganes, están al estallar los residentes. Esas personas llevan una semana, prácticamente, sin corriente en esos dos barrios de Santa Clara, además del Condado Sur, que también lo están llevando muy tenso”, según comunicó el opositor Guillermo del Sol.
De acuerdo con el comunicado emitido por la Unión Eléctrica de Cuba, actualmente se encuentran fuera de servicio tres unidades de las centrales termoeléctricas “Máximo Gómez” y “Ernesto Guevara” y se mantienen las labores de mantenimiento en otras tres instalaciones. Para el horario pico se estima un déficit de 520 MW, lo que supone que la situación con los apagones se mantendrá al menos por dos o tres semanas más.
“Mientras se mantengan los apagones y sigamos sintiendo las molestias, seguirán las insatisfacciones y será difícil cambiar los estados de opinión”, agregó en su comparecencia el presidente cubano. En medio de la crisis, Díaz-Canel llama al “ahorro” y la “resistencia” mientras el pueblo cubano se las debe ingeniar para sobrevivir precariamente.
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