Aunque aún se posiciona a más de 3000 millas al este de Miami, el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC) se encuentra monitoreando la depresión tropical número 12 de la actual temporada ciclónica, que se formó esta semana en el Atlántico con vientos máximos sostenidos de 55 kilómetros por hora.
El NHC indicó que el nuevo sistema se encuentra a unos 855 kilómetros al sur de Cabo Verde y que en estos momentos no ofrece peligro para la isla de Cuba o la Florida.
“Se pronostica un debilitamiento lento y se espera que la depresión se convierta en un remanente bajo para el jueves”, indican los expertos.
Mientras tanto, una onda nombrada como Invest 91L por estos especialistas, ofrece probabilidades de afectar la costa norte de Venezuela, el Caribe oriental y las islas más meridionales. Aunque podría organizarse gradualmente para el fin de semana, tampoco representa una amenaza inmediata para Estados Unidos.
Aun así, el centro meteorológico de Miami pone atención a la trayectoria de ambos organismos, ya que, tanto las imágenes del radar, como las obtenidas mediante el satélite “muestran una actividad de tormenta eléctrica desorganizada y una combinación de cizalladura del viento hacia el norte y tierra hacia el sur”, según reporta el portal Local 10, aunque “probablemente limitará su potencial de desarrollo durante la semana laboral”.
Depresión tropical número 12
“El sistema está produciendo una gran área de lluvias y tormentas eléctricas en las islas meridionales de Barlovento y las aguas adyacentes. Las imágenes del radar de Barbados muestran que no está bien organizado”, confirma el informe de NHC.
En cuanto a esta onda tropical, puede que se convierta en depresión durante los próximos cinco días, a pesar de que no ha mejorado su organización en las últimas horas, ni posee un centro bien definido por el momento. Medios como Local 10 advierten a quienes posean intereses en Centroamérica y el sur de México monitorear de cerca el progreso de ambas zonas de bajas presiones.