Un estudiante de periodismo en Cuba ha publicado un post donde relata qué le dieron de almuerzo en la Universidad de Matanzas: “arroz y frijoles. Ya, no hay más. Surprise: no hay plato fuerte”.
Mario César Fiallo asegura en su perfil que “la cuestión del comentario es comentar, no criticar; que nadie se alarme, porque todo el mundo sabe, que en una beca, se pasa hambre”.
Repite una y otra vez que su intención no es la de responsabilizar a nadie ni la de cuestionar, pero describe cómo tienen que ingeniárselas los estudiantes becados en Cuba para poder alimentarse y formarse, que es la razón final por la que están allí.
Mario busca explicaciones que “nadie” da, escribe. Sin embargo, cuenta que entre que no le alcanza el dinero y en su bandeja no hay “plato fuerte”, al parecer se botó la casa por la ventana en el décimo congreso de la FEU de la Universidad de Matanzas.
“Todos sabemos qué se comió y qué se bebió y a dónde se fue. No es necesario que lo escriba, porque todo el mundo en la casa de altos estudios lo sabe. No se puede analizar el daño que hace el calor en un sitio con aire acondicionado”, apuntó.
El joven estudiante busca que alguien le diga cuánto tiempo “la cosa va a estar mala”.
“Yo al menos traigo alguito de mi casa (el que puede). ¿Qué hay de los que no pueden? A esos no me atrevo a encerrarlos en un paréntesis, porque existen, porque los conozco, porque a sus madres no les alcanza el salario, porque pasan hambre en la universidad”, manifiesta en su publicación.
Su comentario sobrepasa las 70 opiniones. Un usuario le respondió de esta manera: “guapea, estudia y gradúate de nivel superior. No te quejes, millones de seres en el mundo no tienen nada que comer. Te ofrecen poca comida, es cierto, pero becado gratis estudias”.
Estudiante de periodismo en Cuba habla sobre el hambre en las becas
Aunque Mario intentó restarle fuerza a su denuncia, la presidenta de la Unión de Periodistas en Matanzas ha salido en una suerte de “defensa anticipada” del estudiante.
“Mario suelta esto en Facebook. Y ahora habrá quienes digan que este no es el espacio. Imagino que querrán sancionarlo y quizás… Nada de eso va a suceder. La inteligencia debe prevalecer. Y no podemos seguir matando al mensajero, ni botando el sofá. En Cuba seguimos pensando que si existe y no se publica es como si no pasara. Por pensar así hubo un 11 de julio y hay recurrentes protestas en muchos lugares de Cuba”, señaló.
Al final, agregó: “me siento un poco culpable de que Mario haya escrito este post. Culpable y muy orgullosa. Orgullosa de formar jóvenes que no se queden callados. Jóvenes que entienden que ser periodista conlleva un compromiso con la gente”.