El gobierno cubano ha concluido la “Tarea Ordenamiento”, una iniciativa implementada a principios de 2021, tras tres años de esfuerzos, debido a que “no se han alcanzado todos los objetivos propuestos”, según declaraciones del Ministro de Economía, Alejandro Gil.
Según un informe del periódico estatal Granma, el anuncio se realizó el pasado viernes durante el VII Pleno del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (CCPCC).
El informe añade que “se elimina el punto 35, que trata sobre el seguimiento a la implementación de la Tarea Ordenamiento, ya que no se han cumplido todos los objetivos propuestos, y se propone añadir nuevos lineamientos asociados al Programa de Estabilización Macroeconómica”.
En cuanto a los lineamientos para el período 2021-2026, Gil especificó que se propuso modificar 36, añadir 15 y eliminar tres.
En relación con los anuncios en el VII Pleno del Comité Central del PCC, el economista cubano Pedro Monreal indicó en su perfil de X: “se ha mencionado la necesidad de evaluar el cumplimiento de los documentos partidistas sobre la economía, corregir desviaciones, actualizar y agregar nuevas propuestas. Podrían comenzar por descartar el obsoleto esquema de planificación que proponen”.
Ordenamiento en Cuba
Monreal agregó que “la dirección planificada del documento de la Conceptualización corresponde esencialmente a un modelo propuesto en la URSS hace medio siglo, conocido como reforma Liberman-Kosygin, que fue aplicado con diversas variantes en varios países y que no resultó sostenible”.
El 10 de diciembre de 2020, el gobernante Miguel Díaz-Canel afirmó que el ordenamiento “pondrá al país en mejores condiciones para llevar a cabo las transformaciones que demanda la actualización de nuestro modelo económico y social, sobre la base de garantizar a todos los cubanos la mayor igualdad de oportunidades, derechos y justicia social (…) promoviendo el interés y la motivación por el trabajo”.
La “Tarea Ordenamiento” comenzó en enero de 2021 y supuso cambios drásticos en cuatro áreas: buscar la unificación monetaria y cambiaria con la retirada de circulación del peso cubano convertible (CUC), desmantelar el sistema de subsidios sociales, y una reforma en los salarios e ingresos.