Bajo título “Migración, del arquetipo a la realidad”, un artículo del diario oficialista Granma busca exculpar al gobierno cubano de la reciente crisis migratoria en la Isla.
“Los cubanos no salen huyendo de una dictadura. Salen de un territorio en paz donde, en muchos casos, tienen empleos y acceso a todos los servicios que brinda el Estado en el momento de emigrar”, asegura su autora.
Obvia impunemente la crisis que enfrenta en la Isla y que afecta a todos esos servicios de los que se enorgullece.
Antes, menciona que los cubanos se marchan del país “buscando mejoras económicas, entre otros móviles diversos” (que no desea señalar).
Minimiza el hecho de que casi 180 mil cubanos hayan llegado a las fronteras de los Estados Unidos desde octubre pasado porque emigran, como promedio, “más de 200 millones de personas en el mundo desde países capitalistas que no tienen una economía bloqueada”.
El artículo se vanagloria de que los cubanos que emigran se van con un “significativo capital cultural acumulado en el socialismo”.
La periodista considera que ello “constituye una ventaja competitiva de peso en el mercado laboral del país destino, y en el caso del sur particularmente, una ventaja de la cual no disfrutan la media de las personas nacidas en el lugar”.
¿Los cubanos huyen de una dictadura?
Debería preguntar a quienes emigran por qué sienten que deben empezar de cero en nuevo país, a pesar de ese gran “capital cultural”.
Asimismo, considera que muchos viajan con “cierto capital económico adquirido por la venta de propiedades personales” y que gozan de “condiciones de excepcionalidad para regularizar en breve su situación migratoria y encontrar empleo”.
De esta manera la prensa estatal se alinea con la postura del gobierno cubano de culpar a los Estados Unidos por la actual crisis migratoria, quitándose cualquier atisbo de responsabilidad.
El Presidente Díaz-Canel ha hecho referencia con anterioridad a las “ansias acumuladas” de quienes desean migrar, a la vez que abrió una vía de escape a través de Nicaragua.