El Gobierno de Cuba ha presentado un plan económico para el este año 2024 que implica una serie de cambios en el sistema de subsidios, los precios y las tarifas de los servicios públicos.
El primer ministro Manuel Marrero explicó las principales medidas durante su intervención en la Asamblea Nacional en diciembre pasado.
Según Marrero, el plan busca “subsidiar a personas y no a productos”, para crear “un esquema más justo y eficiente” que reconozca las diferencias sociales y económicas existentes en el país.
“No es justo que reciban lo mismo los que mucho tienen que los que muy poco tienen. Hoy nosotros le subsidiamos lo mismo a un ancianito pensionado que al dueño de grandes negocios privados que tiene mucho dinero”, afirmó según cita la agencia EFE.
Para ello, el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social se encargará de identificar a las personas por su grado de “vulnerabilidad”, para “no dejar a nadie desamparado”. Estas personas podrán seguir adquiriendo productos básicos muy subsidiados con la cartilla de racionamiento, que se mantendrá vigente.
Marrero no dio más detalles sobre los criterios o el plazo para realizar esta clasificación, pero aseguró que se hará en “las próximas semanas y meses”. Este anuncio supone un cambio significativo en la política de subsidios de Cuba, con un enfoque renovado en abordar las desigualdades económicas.
MEDIDAS ECONÓMICAS CUBA
Además, el plan económico incluye aumentos en los precios de los combustibles, la electricidad, el agua y otros servicios, así como el fin del subsidio universal a la canasta de alimentos básicos.
Estas medidas responden a la necesidad de ajustar los ingresos y los gastos del Estado, así como de estimular la producción nacional y reducir la dependencia de las importaciones.
El Gobierno también anunció que debido a problemas en la industria poligráfica, no se pudo asegurar la producción y entrega de las libretas de abastecimientos del año 2024 en la etapa prevista. De 4 millones 17 mil núcleos, se han concluido 2 millones 400 000 libretas, el 59% del total.
Sin embargo, esto no afectará a la venta de productos de la canasta familiar normada a la población, que se podrá realizar con la libreta del año anterior o con el carné de identidad, aseguraron en nota del MINCIN.