¿Intoxicaciones y muertes por sal de nitro en Cuba? Salud aclara rumores

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Desde hace varios días circulaba por toda Cuba el rumor de intoxicaciones y muertes por el consumo de sal de nitro. “Se robaron un cargamento de sal de nitro y lo están vendiendo como sal común”, alertaba un cartel en grupos de WhatsApp y Facebook de ciudadanos cubanos. ¿Será cierto? El Ministerio de Salud de la isla aclaró los rumores.

Según el diario oficial Granma: “No hubo robo de sal de nitro ni hay fallecidos por consumirla”. Aunque los rumores se extendían a distintas partes de la isla, como Mayabeque, Artemisa o Matanzas, lo cierto es que no pasó otra “bola” de las tantas que abundan en las redes sociales.

El rumor era sumamente catastrófico pues señalaban que la sal de nitro había sido desviada y su consumo había ocasionado la llegada a los hospitales de pacientes con falta de aire y varias muertes por asfixia, incluida la de menores. En un final, todo falso, según las autoridades cubanas.

Esto era falso

Autoridades del Ministerio de Salud Pública precisaron a dicho diario oficialista que ningún niño o adolescente falleció por ingerir sal de nitro, desmintiendo así los rumores que todavía circulan por la isla. Pero, ¿de dónde salió ese rumor?

Robo de ¿sal de Nitro?

En concreto sí ocurrió un robo en Artemisa, el pasado 1.º de noviembre, pero de “sal de cura”, que solo contiene un 12% de este tipo de sal antes mencionado. Y la sal de nitro únicamente es mortal en grandes cantidades. Según la propia oficialidad, el consumo de esta sal sustraída en la Empresa Pecuaria Genética Los Naranjos, perteneciente al Ministerio de la Agricultura, solamente daría una simple “diarrea”.

Este tipo o nitrato de potasio, en Cuba, suele emplearse en la industria alimentaria como agente conservador por sus propiedades bactericidas. En la gastronomía es utilizada para «curar» carnes y embutidos, pero su consumo directo se considera peligroso, pues puede causar intoxicación y, en el peor de los casos, la muerte, si se ingiere en grandes dosis.

El Decreto-Ley No. 9 de la Inocuidad Alimentaria, y su reglamento, el Decreto No. 18, incluyen sanciones a quienes cometan fraude alimentario, como el caso de la sustitución de la sal normal por sal de nitro.

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