Venden andadores para ancianos y sillas sanitarias para discapacitados, comercializadas por el gobierno cubano a casi 5 mil pesos, un monto mucho mayor del salario medio de cualquier trabajador estatal.
Ambos artículos fueron promocionados en la página oficial de Facebook de la Empresa Provincial de Farmacias y Ópticas de Holguín que, de acuerdo a su descripción, ofrecen una “amplia gama de productos y servicios que la posicionan como líder en la región oriental del país”.
“Nos hacemos eco de tus necesidades”, destaca el post promocional. “Muy pronto, en unidades de farmacias seleccionadas, ayudas técnicas para agilizar la vida de nuestros pacientes. Sillas sanitarias: adecuadas para el aseo y la alimentación de pacientes postrados o con limitaciones físicas a un precio de 4,830 CUP”.
En tanto, los andadores en cuestión alcanzan el exorbitante precio de 4,235 CUP que garantizan, según la empresa, “un desplazamiento seguro para los ancianos”.
Este grupo etario en Cuba percibe jubilaciones que, en la mayoría de los casos, ronda los 1600 pesos, por lo cual necesitarían más de cuatro meses para poder adquirir cualquiera de los dos artículos.
Venden a precios altos para discapacitados
Decenas de usuarios indignados dejaron sus comentarios al pie de la publicación de la empresa FARMOX. “Es vergonzoso que cuatro tubos con una cinta de plástico le pongan ese precio”, dijo uno. “No se trata de un patinete, es un artículo para un postrado o anciano que por lo general su ingreso es una chequera algunos otros ni eso”.
Otra persona lamentó que artículos tan necesarios que no constituyen lujos en sí, sean comercializados a precios sumamente inaccesibles.
“Esto es una falta de respeto”, refirió la internauta. “¡Que Dios nos ampare de necesitar esos artículos, porque con esos precios…!”, posteó otra cubana.
Una nota publicada a principios de mes por la Agencia Cubana de Noticias afirma que la provincia de Holguín destaca por la producción de “sillas de ruedas, muletas, andadores y bastones, medios indispensables para la movilidad y la inclusión social”.
Se ve que no viven en Cuba, aquí los precios están altos, pero nadie pensaría en hacer una compra de ése valor en un mes, como en todas partes del mundo se va guardando hasta lograr llegar a la cifra deseada y entonces se realiza el acto de compra, gracias. Sigo leyéndolos.