El exboxeador haitiano Azea Augustama, más conocido por el sobrenombre de “el sicario haitiano” fue arrestado por amenazas de perpetrar un tiroteo en un gimnasio de Miami.
La Policía de Florida logró detener a Augustama, de 39 años, antes de que hubiera que lamentar heridos o pérdidas humanas.
De acuerdo con el informe, el exboxeador había asegurado que dispararía en este centro de fitness sin importar quién se encontrara en el interior y que lo haría con un fusil de asalto recién adquirido por él.
Aunque nació en Haití, Augustama se mudó siendo menor de edad a Estados Unidos y acumula durante su carrera como deportista profesional 18 victorias.
Tras retirarse como boxeador comenzó a trabajar como entrenador personal en el gimnasio BOXR, del cual fue despedido por conflictos y discusiones en el interior de las instalaciones. Los propios directivos del centro le retiraron su membresía y emitieron una orden temporal de alejamiento.
“Se puso un poco molesto y agresivo, así que tuvimos que apartarlo y decirle: ‘Mira, no puedes estar hablando con la gente así’, y básicamente se enojó”, comunicó a los medios locales Mario Attalla, propietario del gimnasio en cuestión.
Exboxeador haitiano en Miami
La semana pasada, Augustama informó que recogería sus pertenencias en el local y llegó a publicar en su cuenta de Instagram varios mensajes en los que advertía que “estaba considerando cometer un tiroteo masivo”.
También mostró una imagen de una persona con la que había tenido problemas a la que presuntamente “estaba considerando dispararle” con una bazuca.”Él es el primero cuando coja mi arma”, escribió. Más tarde, se le vio al boxeador ingresar a una tienda de joyas y armas, donde adquirió un rifle AK-47.
Azea Augustama compareció ante la corte y enfrenta dos cargos por emitir intimidaciones escritas para cometer un tiroteo masivo y por amenaza de muerte.
Tras su primera comparecencia ante el juzgado del condado de Miami-Dade, se le impuso una fianza de tres millones de dólares, pero debe permanecer en arresto domiciliario y “total confinamiento”, en caso de que pueda depositar la cantidad que se le exige.
“Creo que representa un gran peligro para la comunidad, así como para las víctimas, en vista de sus acciones y las amenazas que se hicieron”, señaló al respecto durante la audiencia la magistrada Mindy Glazer.