Con cuatro derrotas y un triunfo, el equipo que representa a Cuba en la Serie del Caribe marcha último en la tabla de posiciones y dejó para la historia (y los titulares) el resultado ante Venezuela.
Aficionados y especialistas se agarraron al rayito de esperanza que generó el triunfo inicial por la mínima ante Curazao. Pero, la batería venezolana se encargó de hacer trizas esas ilusiones infundadas.
Si las autoridades del béisbol cubano tienen que cumplir su palabra y llevar al equipo ganador del torneo doméstico que se les antoje, sin refuerzos, poco más se puede esperar.
Pero, las derrotas no pueden apuntar únicamente hacia el conjunto tunero-granmense. Cuba ha participado anteriormente con mejores equipos y no se ha podido hacer mucho más, excepto en la Serie del Caribe en la que Frederich Cepeda “salvó el play”.
“Increíble. De ocho equipos del Caribe somos los últimos. Pero nada, cuando regresen seguirán entrenando con los mismos métodos de la década del 90, comiendo picadillo y cobrando 4000 pesos cubanos. Somos el hazmerreír del Caribe. Con razón la mitad de los peloteros se han ido de Cuba”, opinó un seguidor en la página de Telerebelde.
Cuba es última en la Serie del Caribe: algunas opiniones
El periodista deportivo tunero Dubler Vázquez consideró que “cuatro refuerzos son muy pocos para un torneo de siete juegos consecutivos en la fase clasificatoria y hasta nueve encuentros para los que lleguen a semifinales”.
“En ese equipo de Agricultores cabían mínimo otros cuatro lanzadores y al menos dos jugadores de posición más”, agregó.
Igualmente, señaló que “el prestigio del béisbol cubano está cada vez más golpeado por los malos resultados internacionales en casi todas las categorías”.
“Aquí hay un error de concepto nuestro que seguimos viendo la Serie del Caribe como una competición de clubes, cuando en verdad se trata de una puja entre cada una de las Ligas de la región”, comentó en su perfil.
Por su parte, Boris Luis Cabrera, periodista capitalino sacó a relucir dos estadísticas negativas del team Cuba: “Los peloteros cubanos solo han recibido siete bases por bolas y son los que exhiben un menor porciento de embasado. Los lanzadores cubanos son los que menos ponchan (21)”.