Frank Herrera, lanzador de los Leones de Industriales en la 62 Serie Nacional, reveló a la revista Play Off Magazine que los peloteros de la isla no tenían privilegios y que vivían las mismas dificultades que el resto de los cubanos. Te compartimos este artículo de los archivos.
Herrera dijo que la vida de un pelotero de Series Nacionales era “una vida como la de cualquier cubano más. Un pelotero que no tiene privilegio y tiene la misma necesidad de todos”. También se refirió a las condiciones económicas y laborales de los deportistas, que, según él, no eran justas ni adecuadas.
“Tenemos que hacer cola para el pollo, recoger los ‘mandados’ de la bodega. Es difícil, a veces, porque el salario no es suficiente y hay que buscar la manera de que los peloteros puedan contar con un mejor respaldo económico”, expresó Herrera.
El lanzador habanero criticó que no hubiera diferencias salariales entre los peloteros, independientemente de su rendimiento, su formación o su participación en el equipo.
“Son un grupo de cosas que tenemos mejorar. Hoy todos cobramos lo mismo. Hay que buscar la manera que no sea así, debe existir una diferencia entre el que juega todos los días y el que no. No pueden cobrar lo mismo. Porque esas diferencias existen en la vida y no podemos ser todos iguales”, agregó.
Frank Herrera, de Industriales, salarios
Herrera pidió que se reconociera el aporte de los peloteros más útiles y que se les diera una mejor compensación económica.
“Tienen que existir diferencias entre los pagos de los peloteros, debido a que no todos tienen el mismo rendimiento ni el mismo aporte al equipo. El lanzador exigió que los más útiles deben ‘tener mejor compensación económica y eso hay que tratar de hacerlo urgentemente'”, concluyó.
Estas palabras de Herrera contrastan con la realidad de muchos peloteros cubanos que han logrado triunfar en las Grandes Ligas de Estados Unidos, donde reciben salarios millonarios y gozan de prestigio y reconocimiento. Según el sitio Spotrac, hay más de 150 peloteros cubanos entre Grandes Ligas y Liga Menor, y algunos de ellos se encuentran entre los mejores pagados de la MLB.
Por ejemplo, José Dariel Abreu (Astros de Houston) tiene pactada una suma de $19,000,000 USD para este 2023; Yasmani Grandal (Chicago White Sox) recibirá $18,000,000 USD; y Yoan Moncada (Chicago White Sox) ganará $17,800,000 USD. Estos son solo algunos ejemplos de las grandes diferencias salariales entre los peloteros cubanos dentro y fuera de la isla.
Estas historias nos muestran las dos caras del béisbol cubano: la precariedad y la injusticia dentro de la isla, y el éxito y el sacrificio fuera de ella. ¿Qué opinas tú sobre este tema? ¿Crees que los peloteros cubanos merecen mejores condiciones y oportunidades? ¿Qué cambios deberían hacerse para mejorar el béisbol cubano?