En los días previos de Acción de Gracias y Navidad, el Aeropuerto Internacional de Miami se preparó para recibir un número récord de pasajeros. Creen que pudiera convertirse en el más activo de su historia, con cifras que superen los 1.8 millones de viajeros hasta el martes 29 de noviembre.
Además de haber alistado sus terminales con vistas a la fecha, el MIA garantiza las condiciones óptimas para aquellos pasajeros que necesiten atención especializada a causa de determinada capacidad.
En ese sentido, el aeropuerto ofrece varias facilidades para personas que precisen asistencia, ya sea para aquellos con movilidad reducida o no videntes, así como estacionamiento reservado para discapacitados, áreas para mascotas, menores solos, madres lactantes e instalaciones específicas como baños, teléfonos y puertas adaptadas.
Desde el año pasado, el MIA incorporó también una Sala Multisensorial para la espera de los vuelos.
De acuerdo con el propio sitio del aeropuerto, “las madres lactantes son bienvenidas en cualquier lugar de MIA. Para las mamás que buscan una opción privada tranquila, busque las suites MIAmamas. Las unidades están ubicadas en cada uno de los vestíbulos de MIA, después de la seguridad”.
Aunque los viajeros que precisan de una silla de ruedas para trasladarse deben solicitarla a su propia aerolínea, el MIA ofrece igualmente la posibilidad de reclamarla al aeropuerto completando un formulario de solicitud de carril en su sitio web 48 horas antes del arribo a la instalación.
Aeropuerto de Miami incluye nuevos servicios
Además, el Departamento de Aviación ha designado puertas para ayudar a los clientes en la coordinación de lugares de recogida.
Asimismo, MIA utiliza el servicio “Aira” que conecta a pasajeros ciegos o con baja visión a un agente altamente capacitado y ubicado de forma remota.
Autoridades del aeropuerto aseguraron a los medios locales de Miami que sus trabajadores han recibido capacitación en servicio a personas que porten en su cuello “la cinta de girasoles” y les impartieron prácticas para atender a todos los viajeros con discapacidades no visibles, tales como pérdida auditiva, autismo y estrés postraumático.