Fernando García Manso, presidente de la compañía española Plus Ultra calificó 53 millones de euros como una ayuda mínima según una entrevista otorgada al diario El Mundo.
García Manso aclaró los cinco puntos que más ha escandalizado al mundo de la aeronáutica mundial y que hasta ha salpicado a Cuba. En España ha sido muy polémico su rescate, pues otras aerolíneas más importantes (Air Europa o Iberia) no recibieron la ayuda y se fomenta la idea de que sirve para lavar dinero de gobiernos como el de Nicolás Maduro.
Según el presidente, ellos sí son una compañía estratégica. Dijo que nadie cuestiona que la industria del transporte aéreo, cuando España depende del Turismo en más de un 12% del Producto Interno Bruto (PIB), sea un sector importante. Añadió que sean del tamaño que sean, tienen derecho a acceder a las ayudas en igualdad de condiciones.
Dijo que Plus Ultra garantiza la competitividad con las conexiones con Latinoamérica. La conectividad aérea entre España y Latinoamérica es crucial para el desarrollo económico de España y el liderazgo de Madrid como puerta de entrada a esa región, señaló.
“Cuando finalice la integración de Air Europa en Iberia, la única alternativa al operador dominante que tendrán los ciudadanos para conseguir vuelos a precios competitivos desde España hacia Latinoamérica será Plus Ultra”, añadió.
Escándalos con Venezuela y Cuba
Sobre sus vínculos con Venezuela, García Manso dijo que ellos son apolíticos. Agregó que sin vínculos ideológicos ni de otra índole con los gobiernos de los países a los que vuelan. Aquí incluyen a la isla, donde hicieron nicho desde los inicios de la compañía.
“Creo que estamos teniendo un trato injusto sólo por el hecho de que algunos de nuestros accionistas sean venezolanos”, dijo al respecto. No obstante, Plus Ultra calificó 53 millones de euros como “ayuda mínima” del gobierno de Pedro Sánchez.
¿Por qué los bancos no le dieron crédito? El presidente de Plus Ultra explicó que solicitaron préstamos: Pero que solo se concedían a clientes que tuvieran ya concedida financiación previa o que se fueran a dedicar a refinanciar operaciones previas.
“Existe la creencia generalizada de que los créditos se daban casi de forma automática y la realidad para muchas empresas es que los bancos han aplicado criterios muy estrictos de riesgo y, ante cualquier duda, han denegado financiación”, concluyó.