En diciembre de 2023 cumple medio siglo la ermita de La Caridad de Miami, un centro espiritual que devino como un refugio para los exiliados cubanos, que buscan allí protección religiosa al pie de la patrona de Cuba.
“Cuando muchos cubanos aún no podían tener su casa propia, fueron capaces de construirle una hermosa casa a su patrona”, ilustró el Arzobispo de Miami, Thomas Wenski, quien presidió la ceremonia religiosa que inaugura el inicio del año jubilar por el 50 aniversario.
La primera piedra para levantar el santuario fue colocada el 20 de mayo de 1967 luego de que hubiera arribado a la ciudad, el 8 de septiembre de 1961, la imagen de la Virgen de la Caridad venerada hasta hoy y proveniente de la Parroquia de Guanabo en La Habana.
Aunque ese mismo día se ofició una misa en su honor en el Miami Stadium, ante 30000 cubanos exiliados, se precisaba de un retiro más apropiado para la patrona.
Fue el Arzobispo Coleman F. Carrol quien convocó religiosos de Miami para que colaborasen en la construcción de la ermita.
“La diócesis de Miami, en el día de hoy, exhorta a todos los cubanos: artistas, arquitectos, escultores, pintores y artesanos a que den sus talentos y tiempo a fin de alcanzar esta meta”, exhortó Coleman en aquel momento según reseña el sitio web del santuario.
Fue el 2 de diciembre de 1973 cuando quedó inaugurado oficialmente el santuario. Años más tarde, en 1994, se consagró solemnemente el altar de la Ermita, donde se ubicó la primera piedra que contiene tierra de las distintas provincias de la isla fundidas con agua que trajeron quince balseros.
Ermita de La Caridad de Miami
“La Ermita es la casa de todos los hijos de María de la Caridad, sin distinción de sexo, raza, o religión, a los cuales espera todos los días para acogerles bajo su manto de amor maternal, el manto de la Virgen de la Caridad, madre del amor encarnado, en este pedacito de cielo al lado de la bahía de Biscayne”, describe el referido sitio.
Uno de los atractivos principales del santuario es su gigantesco mural de la virgen, de 747 pies cuadrados, pintado por Teok Carrasco y la colaboración de otros artistas en 1977.
“Mi mensaje lo puedo sintetizar en estas palabras: El pueblo cubano encuentra su salvación en los brazos de la Virgen de la Caridad”, ha referido el pintor sobre su magnífico regalo a los religiosos exiliados.