¿Qué opina el gobierno cubano sobre el cierre de frontera de EE.UU?

Biden niega la deportación de migrantes cubanos que entren por la frontera
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La noticia que resuena en los medios esta semana es sin duda alguna el cierre de frontera por parte de la administración de Joe Biden, en EE.UU para cubanos, haitianos, nicas y venezolanos. Y así reaccionó el gobierno cubano.

Aunque en un primer momento el gobierno cubano se limitó únicamente a publicar la noticia algunos funcionarios del país ya han expresado su opinión respecto a la nueva medida.

Como era de esperarse, el gobierno de la isla se alegra de las restricciones migratorias, ya que, de continuar la fuga masiva por Nicaragua, en los próximos años la isla perdería una parte importante de su población en edad laboral. 

Unos 225 mil cubanos arribaron a Estados Unidos por esta vía en 2022, superando los anteriores éxodos de El Mariel y la crisis de los balseros, los más significativos de la historia.

“Hemos mantenido una posición consistente a favor de la migración regular, ordenada y segura entre Cuba y los EE. UU.”, comunicó Ernesto Soberón, Director de Asuntos Consulares y de Cubanos Residentes en el Exterior (DACCRE) de la Cancillería.

Soberón también culpó a la Ley de Ajuste cubano de dar preferencias migratorias a los ciudadanos de la isla y aseguró que el gobierno norteamericano insta a los cubanos al peligro que supone lanzarse al mar o realizar el peligroso trayecto por Centroamérica.

Cierre de frontera, así reaccionó gobierno cubano

“La emigración irregular es riesgosa, en no pocas ocasiones, lamentablemente, cuesta vidas y como regla convierte a las personas en víctimas del crimen organizado, de traficantes, de la extorsión y el abuso en diversas formas”, agregó el funcionario.

El representante también critica el incumplimiento desde 2017 del compromiso de otorgar 20 mil visas anuales y el cierre del procesamiento de visas en la Embajada de EEUU en Cuba, aunque reconoció que se había “corregido recientemente”.

En ese sentido, y a su entender, dijo que lo ideal sería “una relación migratoria más normal”, que incluyera “visitas temporales entre los dos países”, para disminuir el potencial migratorio y los intentos de entrar a EEUU por vías irregulares; “al tiempo que favorecería la comunicación entre las familias cubanas”.

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