El pasado domingo, alrededor de las 9 p.m., la policía de Miami-Dade realizó un macabro descubrimiento en un apartamento ubicado en la zona de 17400 NW 68 Avenue.
Al llegar al lugar, los oficiales encontraron los cuerpos sin vida de cuatro personas: un hombre de 60 años, una mujer de 50 años, un joven de 18 años y una niña de 13 años, reportó WSVN.
Las investigaciones preliminares indican que las muertes se produjeron dos semanas antes del hallazgo, y que el responsable del crimen sería el padre de la familia, Víctor Penalba, quien presuntamente asesinó a su esposa, Yumara Martínez, a sus hijos Jason y Stephanie, y luego se quitó la vida.
El Departamento de Policía de Miami Dade (MDPD) detalló que la terrible escena se descubrió tras una llamada de auxilio solicitando la verificación del bienestar de la familia, ya que no se tenía noticias de ellos desde hacía dos semanas.
Al llegar al apartamento, los oficiales se encontraron con un “olor fétido distintivo” y múltiples moscas volando alrededor de la puerta.
“Una vez dentro, descubrimos a cuatro personas muertas”, declaró el oficial Álvaro Zabaleta del MDPD. “Las investigaciones apuntan a que Víctor Penalba, de 60 años, disparó fatalmente a su esposa Yumara Martínez, de 50 años, a su hijo Jason, de 18 años, y a su hija Stephanie, de 13 años, antes de suicidarse con la misma arma”.
Suceso trágico en Miami-Dade
Zabaleta también mencionó que este tipo de tragedias son una lamentable consecuencia de la violencia doméstica, la cual suele escalar si no se atiende y se toman las medidas necesarias.
Los amigos de Jason, estudiantes del Miami Dade College, fueron quienes alertaron a las autoridades al no tener noticias de él durante dos semanas. La última persona que habló con Jason fue su novia el 28 de febrero.
En declaraciones a 7 News, los amigos de Jason lo describieron como una persona bondadosa. “Siempre tuvo un buen corazón”, dijo uno de ellos. “Mis amigos y yo decidimos llamarnos y pensar: ‘Ya han pasado dos semanas, definitivamente deberíamos ir a ver qué pasa'”.
Por su parte, el hermanastro y la hermana de Yumara lamentaron no haber intervenido antes para evitar la tragedia familiar.
Este caso ha conmocionado a la comunidad de Miami-Dade y pone de relieve la importancia de abordar la violencia doméstica de manera efectiva para prevenir futuros desenlaces fatales.