Tras más de dos años de ausencia en los escenarios de Cuba, Pablo Milanés anunció un concierto en el Teatro Nacional de La Habana planificado para el 21 de junio. Frente a las taquillas de la institución amanecieron cientos de cubanos que hicieron fila para comprar las entradas y otros habían pernoctado en el lugar.
Sin embargo, para su sorpresa, a los cincuenta minutos de venta, se les comunicó que las papeletas estaban agotadas porque las restantes fueron destinadas a “organismos” del gobierno.
“Sabíamos que este concierto de Pablo iba a traer esta situación porque, además, será un concierto único”, explicó a la multitud Nereyda López Labrada, directora del Teatro Nacional y exsecretaria general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura.
“Se sacó una cantidad de entradas para la venta al público y la otra cantidad se les dio a organismos”, agregó la funcionaria.
La mujer también argumentó que, de las 2.056 localidades del recinto, se habían vendido al público solamente “platea y el primer balcón”.
Pablo Milanés pudiera cancelar presentación
La respuesta de la directora causó un revuelo mayor entre la cantidad considerable de cubanos que esperaban para adquirir sus boletos, y que no comprendían por qué se habían destinado tan pocas plazas para el pueblo y sí para los funcionarios y sus familiares.
“El teatro en estos momentos tiene la responsabilidad de la programación porque los demás tienen problemas”, dijo López Labrada, refiriéndose a otros teatros capitalinos que aún no se encuentran abiertos al público por dificultades en su estructura. “Nunca se nos había dado un caso como este”, refirió.
Varios de los protestantes pidieron explicaciones e indicaron que “hay un pueblo entero con ganas de escucharlo” y que “Hemos crecido con él y se merece la voz de su pueblo”.
“Las instituciones pueden tener sus capacidades reservadas, pero se tiene que vender al público y que haya transparencia en las cifras. Muchos también somos trabajadores y dejamos de trabajar para venir a comprar una entrada”, exigió otro joven presente en el lugar.
“Quiero también decirles a ustedes que esa masa de personas institucionalmente son también trabajadores”, trató de explicar en vano la funcionaria.
Su actual postura política
Aunque Pablo Milanés reside actualmente en España, siempre ha estado pendiente de la situación de los cubanos e, incluso, criticó al gobierno de la isla por las represiones del 11 de julio del año pasado.
En una reciente entrevista con EFE, a propósito de esta gira titulada “Días de luz”, dijo: “Todavía vemos hoy dictaduras, lo que está haciendo Putin, lo que están haciendo los demás, los que se están aprovechando de las atrocidades que se están cometiendo en Ucrania. En fin, y vemos a las dictaduras campeando por todas partes”.
“Falta mucho, pero la libertad llegará, y no va a ser con tiros, ni bombas, ni metralla, creo que va a ser con flores e imponiéndose la libertad de los pueblos alrededor del mundo”, agregó Pablo.
- Cocodrilos de Matanzas listos para debutar en la Semana Catalana en Barcelona
- Reducen el tamaño del pan normado en Cuba para “garantizar” su distribución
- Descarrilamiento en Cuba: Tren de carga interrumpió servicio y dejó a viajeros varados
- Cuba: de la élite del béisbol a buscar un “papel decoroso” en el Premier 12
- ¿Qué ofrendas se realizan a la Virgen de la Caridad del Cobre en Cuba el 8 de septiembre?
- Raidel Martínez logra su salvamento 36 y se acerca a su récord personal en la Liga Japonesa