Uno de los rostros más conocidos en el mundo del reality es el de Ana María Polo, gracias a su programa “Caso cerrado”.
Sin embargo, antes de convertirse en la carismática presentadora de Telemundo, vivía una vida normal afrontada por disímiles vicisitudes.
Así lo contó recientemente Depor.
De origen cubano y natural de La Habana, se mudó con su familia a la edad de dos años hacia Puerto Rico, donde permaneció durante 12 años.
Al llegar a la mayoría de edad se radicó en Miami y allí consiguió el grado de Derecho, especializándose en la materia de familia para ejercerlo en el estado de la Florida.
Entonces conoce a su primer marido, con el que queda embarazada. Pero, a los cuatro meses de gestación, pierde al bebé y la pareja se separa un tiempo después. Luego llegaría Peter, su hijo, en otro matrimonio.
Su pasión por la televisión y gran dominio del Derecho la llevaron a que en abril de 2001 apareciera en el show “Sala de parejas”, donde fungía como árbitro entre relaciones.
De aquí partiría su show “Caso Cerrado”, que se mantuvo en el aire durante 11 temporadas e incluyó el formato de mediar entre conflictos y educar a la audiencia.
En medio de su fama, llega un duro golpe: le detectan cáncer de mama.
“No solo me veía diferente. Me cambió la estructura del cuerpo, debido a que me sacaron 20 ganglios, el tejido mamario y el seno”, reveló a los medios.
La Doctora Polo es una sobreviviente
Afortunadamente, para ella es una sobreviviente y se ha convertido en portavoz de la fundación Susan G. Komen.
Realiza campañas a lo largo de Latinoamérica y Estados Unidos para la concientización de este problema de salud.
Recientemente, se ha anunciado su regreso a la pantalla chica para producir una nueva temporada de “Caso Cerrado” con Mega Global Entertainment.
Sobre este retorno ha confesado la Doctora Polo: “sí, extraño la televisión. Es como una droga mala y buena”.
Buena porque el que tiene eso por dentro lo lleva y se le satisface a través de ejecutarlo y manifestarlo.
Mala porque cuando no estás haciendo sientes ese deseíto, esa picazón, que es una de las cosas que todavía me hace pensar que voy a seguir haciendo cosas porque todavía siento la picazón y la extraño”.
- Error en la repatriación del cuerpo de un turista canadiense en Cuba
- Quedarse por carta de invitación en España: ¿qué opinan los cubanos?
- ¿Cuánto dinero se necesita para poder comprar una casa en Miami?
- Tres consejos para salvar una relación de pareja
- Así luce la mansión de Alejandro Sanz que vendió en Florida
- Cubano en Brasil, presunto autor de espeluznante asesinato en Río