Denuncian precios. Una cubana cuyo nombre no fue identificado denunció en la página de Facebook “Rompiendo Cadenas” que una cena poco abundante le costó, 8340 pesos en un restaurante de La Habana Vieja. De acuerdo con la publicación de la usuaria, en el establecimiento nombrado Al Carbón, le cobraron casi mil pesos por una ensalada de aguacate, más de 4 mil por tres filetes de pescado y, lo más increíble, 340 pesos por una limonada.
“Esta fue nuestra cuenta en un restaurante en La Habana. La limonada que es ‘la base de todo’ según el Puesto a Dedo costó 340 pesos, la ensalada de aguacate más cara que he visto, costó 850 pesos, y ni qué decir del filete de pescado cuyo precio fue de 1380 pesos cada uno”, protestó la mujer a la que le trajeron una cuenta que podía ser también pagada en dólares, euros o moneda libremente convertible.
“En conclusión, un cubano promedio tiene que trabajar tres meses y guardar su salario íntegro para poder comer un día en un restaurante”, agregó la cubana.
De acuerdo con la página gastronómica A la mesa, el referido restaurante está situado en la Calle Aguacate No. 9 Esquina Chacón y, aunque resulta bastante céntrico y atractivo a los turistas por su decoración, las opiniones en TripAdvisor lo califican como “extremadamente caro”. Este sitio ha sido visitado en varias ocasiones por el reguetonero José Manuel Carvajal Zaldivar, mejor conocido como El Taiger.
Quejas por altos precios
Un usuario identificado como Dany R publicó en TripAdvisor que la relación calidad precio en este establecimiento resulta pésima: “La carne la sirvieron requemada y más seca no podía estar”. Varios turistas que han visitado Al carbón también han quedado insatisfechos con el costo de la comida.
“Tomamos un café y una copa cada uno, ron y mojito, pedimos la cuenta a las camareras que habían sido bastante amables, me indican que puedo pagar en euros, con lo que recibí la cuenta y bueno… 115,50 euros, caro muy caro, pero si es lo que cuesta, dejo 120 junto al ticket e indico a las amables camareras que se queden de propina el cambio, lo que no me podía imaginar, es que, aun así, me robaran en la cara. ¡Vergonzoso!”, reseñó un turista español en Trip Advisor.
Otro visitante extranjero identificado como José Luis quedó asombrado de que un mojito en este lugar costara tres veces más que en la Bodeguita del Medio de La Habana.
Sin embargo, este restaurante es solo uno de los tantos que, a raíz de la Tarea Ordenamiento, modificaron sus cartas de venta basándose en el ascenso de la divisa en el mercado informal.
Hace pocos meses, el presentador y especialista de cine Frank Padrón criticó una heladería habanera donde los platillos alcanzaban precios impensables para el bolsillo de los cubanos. De la inflación tampoco escapan los establecimientos del estado que, incluso, han llegado a equipararse en costos a los negocios privados.
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