¿Qué dijo Ciro Silvino Licea, el excoach de pitcheo cubano a su llegada a Estados Unidos? El exlanzador de Granma y los team Cuba conversó con la periodista Julita Osendi y esto reveló a su llegada a Houston, Texas, donde se radicará.
Licea explicó a Osendi, en una entrevista publicada en el medio independiente CiberCuba, que “la familia es lo primero y Cuba no está nada bien y eso no es secreto”.
El exentrenador cubano agregó que él no se fue ilegal de la isla, sino por el Aeropuerto de Camagüey rumbo a Nicaragua, desde donde fue atravesando fronteras hasta llegar a Estados Unidos.
“Estoy feliz, me reencontré con mi esposa; estoy en el mismo país donde vive mi preciosa hija de 20 años, que estudia en la Universidad de Miami; y quiero enfocarme en poder entrenar a jóvenes peloteros aquí en Houston, Texas, donde pienso radicarme”, aseguró.
Licea explicó que llevaba cuatro meses separado de su esposa, con quien se casó hace 16 años y es “un regalo que me hizo la vida, como lo es mi única hija Helen Leonor”. El exlanzador dijo sentirse bendecido.
El expitcher comentó que tuvo problemas en el cruce con México porque allí se torna todo más violento, además hace días del comentario en redes sociales de su salida y él temía ser descubierto y deportado a Cuba.
Ciro Silvino en Estados Unidos
En medio de su travesía a Estados Unidos, el llamado “Indio del Dátil”, supo del incidente en el “Mártires de Barbados” de Granma, cuando autoridades de esa provincia, del equipo donde militó Licea, intentaron ocultar su gigantografía con una sábana.
“¿Cómo es posible que mi retrato sea tapado con una sábana para después ser quitado de allí y tirado sabe Dios dónde? ¿Qué ejemplo están dando para las nuevas generaciones? Me disgusté mucho. No hay derecho”, cuestionó.
Licea aseguró que en Cuba “cuando dejas de servir a sus intereses te tiran como basura; que vales mientras cumplas con sus predicamentos y cuando no… ¡te desechan!”.
Finalmente, el exentrenador refirió que si mejoraran “las cosas” en la isla y no haya “represión”, él volvería a entrenar un equipo en el país.
“Los hombres y sus mandatos pasan; la vida prevalece. Yo soy cubano y siempre haré todo lo que pueda por mi nación. Si las cosas cambian, si no hubiera represión… ¡por supuesto que sí!”, concluyó.