La habilidad de Arráez para embasarse, combinada con el poder del cubano Jorge Soler en el segundo puesto y un buen manejo de bullpen del cuerpo de relevistas, impulsó a los Marlins de Miami a una victoria por 2-1 sobre Washington en el loanDepot park, para volver a estar por encima de .500 (66-65).
El segunda base Luis Arraez, que lidera las Grandes Ligas en promedio de bateo (.350), hizo su primera aparición como primer bate desde el 6 de agosto en Texas, reportó Paige Leckie para el sitio oficial de los Peces.
Al mánager Skip Schumaker le gusta colocar a Arraez en lo más alto porque considera que es donde hace su mejor trabajo, embasándose y dejando la escena a los bates de poder de Miami.
Sin embargo, lo sacó de esa posición a principios de este mes para que Soler volviera a encontrarse. Y vaya si lo hizo.
El “Cubano Gigante” ha vuelto a mostrar su poder desde que fue adquirido por los Marlins procedente de los Reales el 30 de julio. Ha conectado 10 jonrones con Miami, incluyendo uno solitario el domingo que rompió el empate a uno en la sexta entrada. Soler tiene ahora 25 jonrones en la temporada, empatado con Adam Duvall como líder del equipo.
El cubano dice que se siente cómodo bateando segundo, detrás de Arráez, porque sabe que tiene muchas posibilidades de tener corredores en base cuando le toca el turno. También dijo que le gusta la química que hay en el clubhouse de los Marlins y que espera ayudar al equipo a llegar a los playoffs.
Jorge Soler y los Marlins de Miami
“Estoy muy contento aquí”, dijo Soler. “Me siento muy bien con este grupo de muchachos. Creo que tenemos un buen equipo y podemos competir con cualquiera”.
Los Marlins son conscientes de que están en medio de una apretada carrera por un puesto de comodín en la Liga Nacional. Se sitúan a tres juegos de Arizona (69-62) por el tercer puesto, a 1 1/2 juegos de Cincinnati (68-64) y a un juego de San Francisco (66-63).
Si se necesita un desempate para determinar un puesto de comodín, primero se recurre a los enfrentamientos directos y luego a los registros divisionales. Los Marlins ganaron su serie de temporada sobre los D-backs (4-2) y dividieron su serie con los Rojos (3-3) y los Gigantes (3-3).