Enfermera de Hugo Chávez enfrenta cargos de lavado de dinero

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La venezolana Claudia Patricia Díaz Guillén, quien fuera la enfermera del fallecido Hugo Chávez, enfrenta tres acusaciones de asociación ilícita para lavar dinero y lavado de instrumentos monetarios. 

La mujer, que llegó a convertirse en jefa del Tesoro de Venezuela, se declaró inocente de los cargos imputados, aunque el juez William Matthewman consideró que la misma corría riesgo de fugarse y rechazó su petición de excarcelamiento y permanencia bajo arresto domiciliario.

Díaz tendrá que permanecer detenida en una prisión de Florida sin derecho a fianza, decisión que fue tomada tras una audiencia de más de tres horas, realizada en los tribunales federales de West Palm Beach, al norte de Miami.

Además, a Claudia Díaz se le acusa de aceptar sobornos del magnate venezolano Raúl Gorrín para autorizar lucrativas transacciones monetarias cuando ella dirigía la Oficina Nacional del Tesoro de Venezuela.

Enfermera de Hugo Chávez extraditada

La mujer se había desempeñado como enfermera de Chávez justo antes de su muerte en 2013 y la habían designado al frente de dicha oficina.

De demostrarse su culpabilidad, enfrentaría una condena de hasta 20 años de prisión por cada una de ellas, que sumarían un máximo de 60 años, sumada a la deportación hacia Venezuela cuando haya cumplido ese tiempo en prisión.

Los fiscales temen que la mujer pueda usar el dinero que le envía su esposo para fugarse de Estados Unidos en caso de que le concedan la libertad condicional.  El esposo de Díaz, Adrián José Velasquez Figueroa, se encuentra prófugo de la justicia en España.

También enfrenta los mismos cargos que ella y de conspirar para transgredir las leyes sobre corrupción en el extranjero. El gobierno de Estados Unidos ha reclamado su extradición para procesarlo por sus delitos.  

Díaz había sido extraditada a comienzos de mayo y ha confesado no tener dinero en sus cuentas, ya que sus bienes fueron confiscados.

Una mujer que se presentó como amiga de la familia ante la corte y se identificó como Virginia María Verenzuela dijo que ella y su esposo se ofrecían como garantes para que Díaz pudiera permanecer en su apartamento.

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